Profile: Paulina Ruiz

Paulina Ruiz was born and raised in Raleigh, North Carolina, and has called this state home for most of her 28 years her life. Over nearly three decades, she has watched North Carolina evolve into a more diverse, inclusive, and vibrant place to live. “I firmly believe that North Carolina’s strength lies in the incredible variety of people and cultures,” she says. “I’ve witnessed exponential growth in communities that bring unique talents, traditions, and perspectives—and I’m proud to be part of that story.” 

Paulina is a project manager at an academic medical center where she leads efforts to increase access to and enrollment in health insurance among members of the Latine community. Her work spans policy, community education, engagement, and advocacy, all grounded in evidence and community voices. “I collaborate closely with a diverse and multidisciplinary team to drive strategies that are both community-informed and policy-relevant.” Outside her core role, Paulina also serves on the leadership committee of an employee resource group supporting Latine-identifying employees across her institution, co-leading efforts around mentorship, inclusion, and professional development. 

For Paulina, this work is personal and purposeful. “Through partnerships with Latine-led organizations and community health workers across North Carolina, we bring health insurance education and resource coordination directly to individuals and families who need it most.” The impact is real and deeply felt. She recalls families who finally gained coverage and care because of the project. “What makes this work especially impactful is that it is shaped by the voices and leadership of our Latine community partners. Their lived experiences and insight meaningfully shape the direction and implementation of our project. I truly believe our success is rooted in this collaboration. Together, sí se puede.” 

Paulina’s values are grounded in the spirit of familismo and mutual support that she learned through her cultural upbringing. “My parents, Adriana and Rodolfo Ruiz, made sure these values were central to my life,” she says. “They modeled how to live them through service and generosity.” Even though her family didn’t have extended relatives nearby, they found support in a close-knit community of Mexican families who became chosen family. “They worked hard to preserve traditions and support the next generation, and thanks to them, I maintained my Spanish and a deep sense of cultural pride.” 

She sees the Latine community as vital to every aspect of society. “It’s hard to capture just how much Latine culture and people contribute to our communities. From agriculture to education, health, business, and the arts, Latinos are leaders, workers, creators, and changemakers.” Paulina believes that while the Latine community is often overlooked or unfairly targeted, their contributions cannot be erased. “Latine leadership is powerful. It brings values, vision, and skills that enrich not only our own communities but also the broader world around us.” 

To those visiting the Lotería exhibit, Paulina hopes her story reflects the strength of collective care and cultural identity. “I am forever grateful to the community that nurtured my growth and played such a meaningful role in my upbringing.” Her work, her voice, and her values are all rooted in a deep belief: that through collaboration, equity, and compassion, stronger communities are not just possible—they’re already taking shape. 

Spanish Version  

Nombre: Paulina Ruiz
País de origen: Estados Unidos (herencia mexicana)
Profesión: Gerente de proyectos en acceso y equidad en salud 

Paulina Ruiz nació y creció en Raleigh, Carolina del Norte, y ha vivido en el estado durante los la mayoría de sus 28 años de vida. A lo largo de casi tres décadas, ha sido testigo de cómo Carolina del Norte se ha convertido en un lugar cada vez más diverso, inclusivo y vibrante. “Creo firmemente que la fortaleza de Carolina del Norte está en la increíble variedad de personas y culturas,” afirma. “He visto crecer exponencialmente a comunidades que aportantalentos, tradiciones y perspectivas únicas, y me enorgullece ser parte de esa historia.” 

Paulina trabaja como gerente de proyectos en un centro médico académico, donde lidera una iniciativa para aumentar el acceso y la inscripción en seguros de salud entre miembros de la comunidad latina. Su trabajo abarca políticas públicas basadas en evidencia, educación comunitaria, promoción y abogacía, siempre guiada por las voces de la comunidad. “Colaboro mano a mano con un equipo diverso y multidisciplinario para desarrollar estrategias informadas por la comunidad y relevantes a nivel de políticas públicas.” Fuera de su rol principal, también forma parte del comité de liderazgo de un grupo de empleados que apoya a trabajadores que se identifican como parte de la comunidad latina. Allí, co-lidera las iniciativas relacionadas con el desarrollo profesional, mentoría, liderazgo e inclusión. 

Para Paulina, este trabajo es tanto personal como transformador. “A través de asociaciones con organizaciones comunitarias lideradas por latines y promotores de salud en todo Carolina del Norte, llevamos educación sobre seguros de salud y coordinación de recursos directamente a las personas y familias que más lo necesitan.” Recuerda historias de familias que por primera vez lograron obtener cobertura médica gracias al proyecto. “Lo que hace que este trabajo sea tan significativo es que está guiado por las voces y el liderazgo de nuestros socios comunitarios Latine. Sus experiencias vividas y perspectivas influyen de manera significativa la dirección e implementación del proyecto. Creo profundamente que nuestro éxito nace de esa colaboración. Juntos, sí se puede.” 

Los valores de Paulina están profundamente arraigados en el familismo y el apoyo mutuo que caracterizan a la cultura latina. “Mis padres, Adriana y Rodolfo Ruiz, se aseguraron de que esos valores fueran el centro de mi vida,” cuenta. “Ellos me los enseñaron no solo con palabras, sino viviéndolos todos los días a través del servicio y la generosidad.” Aunque su familia no tenía parientes cercanos en el estado, encontraron apoyo en una comunidad unida de familias mexicanas que se convirtieron en familia elegida. “Gracias a ellos pude mantener mi español y un fuerte orgullo cultural.” 

Paulina considera que la comunidad latina es esencial en todos los sectores de la sociedad. “Es difícil expresar cuántas formas tiene la cultura y el pueblo latino de enriquecer nuestras comunidades. Desde la agricultura hasta la educación, la salud, los negocios y las artes, los latinos son líderes, trabajadores, creadores y agentes de cambio.” Aunque reconoce que muchas veces la comunidad es ignorada o injustamente señalada, afirma con firmeza que sus aportes no pueden ser borrados. “El liderazgo latino es poderoso. Aporta valores, visión y habilidades que no solo benefician a nuestra comunidad, sino que fortalecen y enriquecen a la sociedad en general.” 

A quienes visitan la exhibición de Lotería, Paulina espera que su historia refleje la fuerza del cuidado colectivo y de una identidad cultural compartida. “Estoy profundamente agradecida con la comunidad que nutrió mi crecimiento y que jugó un papel tan importante en mi crianza.” Su trabajo, su voz y sus valores están guiados por una convicción clara: que, a través de la colaboración, la equidad y la compasión, no solo es posible construir comunidades más fuertes, sino que ya están tomando forma.